Lo prometido es deuda, y por fín el jueves le hicimos la pocilga a nuestros cerditos.
La cerdita Clea nos enseñó que lo que más les gusta a los cerdos es revolcarse en el barro así que nos pusimos manos a la obra... Analizamos que el barro se hacía con tierra y agua, así que simulando estos elementos, nosotros decidimos hacer nuestra pocilga de una forma muuuuyyyy divertida : cacao el polvo simulando tierra seca y hielo (frío, frío) que en contacto con nuestras manos se iba derritiendo y convirtiéndose en agua.
Esta es una actividad de experimentación, donde los niños trabajan los sentidos de la vista, el gusto, el tacto, el olfato y descubren los procesos de transformación de los elementos (el hielo en agua y el cacao en líquido). Se trataba de disfrutar observando estas transformaciones. Teníamos las manitas limpias y colocamos un mantel limpio en las mesas, así que no os disgustéis cuando las manos se nos iban a la boca... ¡era inevitable y formaba parte de la actividad! :)
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